Amores que matan / Lo amoroso.

Siempre he creído que para que una pareja funcione debe existir el respeto. En mi caso, mis papás me han demostrado que se puede tener un matrimonio (o noviazgo) firme si ambos ponen de su parte. Igual, no creo en que hay que tener mucho en común para ser compatibles, personalmente prefiero los complementos, y claro, deben existir ciertos puntos de encutro pero no todos.

La relación perfecta no existe, uno debe echarle ganas todos los días. No siempre será todo felicidad, habrá peleas pero de eso se trata el proceso de conocerse y de convivir. Todo al final se trata de acuerdos, de equilibrio y de aceptación. Cada persona es diferente, y hay cosas que se pueden cambiar y otras no.

Se habla mucho de que en algunas relaciones la mujer es sometida a abusos y a chantajes, a golpes. Todo eso está mal, pero si ella no hace nada para romper con la situación pues no es fácil ayudarla. De esta misma manera ocurre con los hombres, entran en una relación destructiva y obsesiva que sólo termina lastimándolos a ambos. Si está mal que un hombre golpeé a una mujer, de la misma manera está mal que una mujer golpeé a un hombre. Es lo mismo, es una falta de respeto un abuso y el amor no se trata de eso.

Algunas mujeres mantienen una relación a base de chantajes, de reproches, llantos y dicen amar mucho a la otra persona al celarla mucho. Lo anterior también entra en el campo del abuso.

Amar es algo que se trabaja, que cuesta pero que no debe permitir estas acciones que sólo denigran y lastiman. Una como mujer no puede entrar en este juego de poder, y el hombre no puede permitir que ocurra, por amor propio, dignidda y autorespeto. Ni los hombres ni las mujeres pueden fundar su relación en chantajes, que sólo dejan ver las inseguridades y el poco amor que se le tiene al otro. Tener atada a la otra persona no nos asegura el tenerla siempre a nuestro lado, al contrario, el permitir al otro tener libertad, el no celar, el dejar a la otra persona ser demuestra la confianza y el amor que se tiene.

Es cosa de analizar, de pensar y de aceptar cuando uno o el otro está mal.

(Afortunadamente encontré a la mejor persona del mundo, ¡TE AMO PACO!)