sábado, 13 de marzo de 2010

EL GRAN ISSEI SAGAWA (o el canibal que se hizo escritor) / Lo muy Yo


Issei Sagawa nació un 11 de Junio de 1949 en un Japón desolado y hambriento tras la guerra. Pese a nacer en el seno de una familia de empresarios acaudalados, en los primeros años de su infancia conoció muy de cerca la cultura de la “supervivencia” en su país. Era un niño pequeño y de aspecto débil y enclenque. El mismo se autocalificaría años después como: “pequeño, feo, con manos pequeñas y pies diminutos”.

Con tan solo cinco años, unas terribles pesadillas atormentaban al pequeño Issei todas las noches. En sus pesadillas se veía a él mismo en el interior de una enorme cacerola con agua hirviente. Trataba de huir, pero no lo conseguía y, lentamente se cocía dentro del agua hasta que alguien lo sacaba de allí, pero no para salvarlo, si no para devorarlo sin compasión.

Estas pesadillas infantiles lo traumatizaron profundamente y fueron la mecha de sus posteriores actos caníbales.

Sagawa tenía dos grandes pasiones, el Sushi y las mujeres occidentales. Le volvían locos aquellos cuerpos esculturales que veía de vez en cuando por las calles de Tokio. Altas, rubias, esbeltas… pero lo que más idolatraba era su piel… su piel blanca, suave y tersa. No lo podía resistir y no tardó en trazar un plan para poder estar rodeado de esas mujeres con las que el soñaba.

A finales de los setenta, la empresa familiar del padre de Sagawa ya había recuperado el poderío económico perdido en la guerra e Issei había disfrutado de una juventud bastante cómoda. Era un tipo inteligente y se había licenciado en literatura, aparte de ser todo un experto y amante del arte en casi todas sus variantes. Su padre se puso más que contento cuando Issei le dijo que quería continuar con sus estudios en la Sorbona, y no dudó en financiarle todos los proyectos. De este modo, el joven Issei adquiriría excelentes conocimientos para heredar y dirigir la empresa familiar a su vuelta.

De este modo, a finales de los setenta Issei se matricula en Literatura comparada en la universidad parisina y por fin cumple su sueño de verse rodeado de esas pieles casi etéreas con las que ha soñado durante treinta años. Su gozo es tremendo, pero ahora que las tiene tan cerca necesita algo más, necesita tocarlas, olerlas… mmmm… quizás saborearlas con el mismo deleite con el que saborea su preciado sushi.

Y como caída del cielo, en 1981 conoce a Rennée Hartevelt, una joven Holandesa que cuadra perfectamente con su perfil. Alta, ojos claros, rubia, esbelta y con la piel más blanca y tersa que jamás ha visto. De tan solo imaginar el roce de su piel a Issei se le disparan sus más perversos sueños.
Rennée es una estudiante abierta y vanguardista, hace poco que ha llegado a París y no conoce a mucha gente. La joven encuentra en Sagawa a un amigo ideal, pues ambos comparten el mismo amor por el arte y la literatura. Durante unos meses, no queda teatro, parque o exposición que ambos no visiten en compañía, incluso en alguna ocasión se les ve bailar en alguna famosa sala parisina. Hasta que una noche, Issei decide ir un poco más allá e invita a Rennée a cenar en su casa.

Sushi, un poco de buen vino… música de fondo. El escenario está preparado para que Issei pueda acariciar por primera vez su piel soñada y, en mitad de la cena, con la escusa de ir a por un poco más de vino va hasta la cocina y retorna con una pistola y, sin pensarlo dos veces, apunta al largo cuello de Rennée y la mata de un certero disparo.

¡Por fin! El cuerpo desnudo de la joven holandesa yace en el suelo ante Issei, que lo contempla totalmente extasiado. Pero éste no tiene ninguna apetencia sexual ante tan bello cuerpo, más bien, su apetencia es gastronómica. Sin prisas, analiza todas las zonas del cuerpo y al final se decide por la cadera derecha… no sabe muy bien por qué, pero le parece la zona más apetecible en ese momento.

Aquí comienza el episodio más cruel de esta historia, Sagawa se lanza enloquecido hacia su segundo plato de la noche asestándole un tremendo bocado en la cadera, pero vaya, la falta de experiencia casi le hace dejarse algún diente en el intento. Tras el esfuerzo, tan apenas ha dejado unas marcas en la piel de Rennée. Analizando la situación, vuelve a la cocina y busca su mejor cuchillo. Ahora sí, lentamente va cortando pequeños trozos de carne que va comiendo con total placer y deleite. El mismo escribiría tiempo atrás en sus memorias: “la carne se deshacía en mi boca, como el sushi. Nunca pude pensar que esto fuera tan exquisito”.

Sin prisa, va cortando y comiéndose a su buena amiga hasta que ya no puede más y decide dejar el resto para más tarde. Durante varios días, el caníbal japonés se alimentaría casi exclusivamente del cuerpo de la holandesa hasta que considera que ya ha terminado con todas las zonas comestibles.

Introduce los restos que han quedado en un par de viejas maletas y busca un lugar donde deshacerse de ellas. Por la noche se dirige a un lago existente en los bosques de Bolonia, lugar verde de paseo y esparcimiento para los parisinos, y allí, lanza las dos maletas sin que nadie lo vea. Pero el lago tiene una profundidad demasiado escasa y, a los pocos días, una pareja que pasea por el lugar encuentra las maquiavélicas valijas, al ver que de una de ellas sobresalía una mano y un pie, avisan horrorizados a los gendarmes rápidamente.

La policía no tarda mucho en cerrar el círculo de sospechosos del salvaje crimen, y cuando se presentan en casa de Issai, éste lo confiesa absolutamente todo con total frialdad.

A partir de aquí, se encadenan una serie de acontecimientos sin mucho sentido. Primero, tras la supervisión de tres psicólogos, Sagawa es tomado como demente y juzgado como tal, internándolo en la institución Paul Guiraud de París. “La estancia en aquel lugar fue horrible, allí estaban todos locos”, confesaría Sagawa. El nunca se consideró loco ni se hizo pasar por ello, sus actos siempre fueron voluntarios y en estado de total conciencia y lucidez.

Pasados unos meses, el segundo sin sentido del caso, Issei contrae una enfermedad, que no es más que una inflamación intestinal y que es diagnosticada por los médicos, ni más ni menos que como una encefalitis avanzada. El veredicto del equipo médico le vaticina unas pocas semanas de vida. El padre de Issei, hombre poderoso y con muchas influencias, consigue que el caníbal moribundo sea trasladado a Tokio, allí continuará recluido en una institución psiquiátrica de alta seguridad, pero por lo menos, morirá en tierra japonesa. El gobierno francés no se opone al traslado, pues al fin y al cabo, quedándole pocas semanas de vida, lo ven como un simple adelanto del trayecto.

De modo que Issei es trasladado al hospital Matsuzawa de Tokio. Y claro, como era de esperar, no muere. Ahora, el caníbal confeso se encuentra en una situación insólita, pues en Japón no tiene ninguna causa pendiente y en Francia se han retirado todas las causas contra él ante su inminente muerte.

Tras tan solo cinco años de cautiverio, Issei Sagawa está libre de toda culpa y queda en total libertad. El caso de este hombre recorrió todos los rincones de Japón, pues él mismo nunca escatimó en ningún detalle de lo sucedido. Para él, comerse a Rennée fue el sumun del placer que un humano puede conseguir en la vida.

Cuando queda en libertad estalla la locura mediática en el país. El prestigioso dramaturgo Okawa, publicaría “Cartas a Sagawa”, relatando los tétricos hechos y vendería más de 300000 ejemplares un poco tiempo. El propio Sagawa escribiría tiempo después sus propias memorias con todo lujo de detalles tituladas “En la niebla”, donde reservaría más de cuarenta páginas para describir como dio cuenta de la pobre Rennée. Este libro fue todo un delirio en Japón vendiendo más de 200000 ejemplares en tan apenas un mes. Entrevistas televisivas, exclusivas, reportajes… el “padrino del canibalismo”, como se le conocería en aquel tiempo, se hace casi millonario explotando su terrible y cruel asesinato.

En algunos programas de televisión incluso se le trata como a un héroe, ironizando todos y cada uno de los pasajes de tan brutal asesinato. El morbo no queda en Japón, y entrevistas de Sagawa en televisiones extranjeras están a punto de crear verdaderos problemas diplomáticos entre Francia, Holanda y los países que emiten dichas entrevistas.

Sagawa ha publicado muchos más libros desde entonces, todos ellos relacionados con el canibalismo y en cierto modo, haciendo una clara apología de él. Todos ellos se han convertido en auténticos Best Sellers a nivel mundial. El más conocido “Me la comí por fetichismo”, es otra obra detallada de los sucesos descritos. En Japón está tratado como un escritor excepcional y, tras casi treinta años de aquellos sucesos, todavía sigue ganándose la vida gracias a ellos. Tambien expone sus obras pictóricas, en las cuales suele mostrar mujeres de piel blanca y cuerpos voluptuosos, y es un contertulio común en diferentes programas de televisión.
 
Sagawa atribuye todos sus actos a aquellas pesadillas que le atormentaron de pequeño y que, como él relata, le llevaron a comerse a Rennée de modo casi obligatorio.

Personalmente, lo de las pesadillas me parecen un cuento chino, o más bien, una fábula japonesa. Pero tras conocer la historia de este psicópata mediático, lo que más miedo me da es la reacción de la sociedad japonesa ante todo lo sucedido, sin guardar el más mínimo respeto por la familia de la joven Rennée Hartevelt, que tuvo que sufrir por triplicado; primero la muerte de un modo tan horrendo de su hija, segundo, la incompetencia de las autoridades francesas dejando marchar a este asesino y, tercero, ver al asesino de su hija tratado como un héroe nacional y relatando con pelos y señales y en todos los medios posibles, tan dolorosos recuerdos.

Por lo menos, lo único que cabe esperar es que no aparezca ningún fan de Sagawa dispuesto a seguir los mismos pasos del afamado caníbal. De todos es sabido que los japoneses son bastante dados a las copias y, a ser posible, mejoradas.

Fuente, http://tejiendoelmundo.wordpress.com/2009/04/19/asesinos-en-serio-issei-sagawa-el-canibal-japones/
Por Sinuhé Gorris

sábado, 6 de marzo de 2010

Derech@ @ decidir(@) vs. YO / Lo importante.



Derecho a Decidir:  Existe el día internacional de la mujer como parte de un movimiento internacional que busca hacer conciencia y ejercer presión para conseguir derechos que les han sido negados históricamente. Establecer un día internacional sobre cualquier tema tiene el único fin de promover tal tema y hacer conciencia en la población sobre sí mismo.

Se utiliza el grafo @ porque es inclusivo. Todas y todos son excluyentes por definición. La construcción histórica del lenguaje ha sido masculina y, como ya apuntó Anabel Ojeda, ha generado invisibilidad sobre el género. El grafo @ se presenta como una anotación moderna inclusiva que reconoce abiertamente el género, es decir, reconoce a tod@s.



Saludos

DERECHO A DECIDIR MX
 
 
Con todo respeto, creo que eso sólo muestra una gran ignorancia. Y claro, ellos no son expertos en lengua, pero por eso creo que no deben hacer declaraciones a los pendejo. ¿El lenguje, una construcción masculina?, el lenguaje es visiòn de mundo, es identidad, son los hablantes.
Mi maestra la Dra. Company les mentaría la madre, porque es una pendejada sin sentido y creo que deberían leer al señor Menéndez Pidal, a Lapesa, a Alatorre, y claro, a la dra Company para que entiendan como cambia el lenguaje, como se adapta, la economía, la facilidad, como ya escribí antes, la visiòn de mundo, el contexto histórico.
 
Quieren hacer división genérica de los sustantivos, amigos, amigas, niños, niñas, ser humano, ¿sera huamana? Después que no hagan drama porque los "seres humanos de sexo masculino" quieran masculinizar algunos sustantivos, ya que pertenecen al género femenino.
 
Y la otra pavada, el uso del símbolo arroba @, para mí y para muchos es sólo un símbolo electrónico, no es un alófono, ni un fonema, no se puede usar en una palabra como todo@s. Me salieron con que la palabra TODOS es excluyente de las mujeres, no digan idioteces, TODOS los seres humanos, TODAS las personas, no me parece que ninguna de las dos maneras sea excluyente.
 
El problema es que parecen que le buscan tres pies al gato. Hay cosas realmente más importantes que tratar sobre las mujeres, y no esa jalada de todos y todas o tod@s . "Lo que no se dice no existe", me respondió una mujer, ahora resulta que las mujeres somos un tema tabú y requerimos de eufemismos. Cuando uno se siente víctima, siempre lo será. Me parece que esas mujeres deberían de cambiar de perspectiva y ver las cosas importantes. Esperar que nos celebren un día y ya, es conformismo y hasta ignorancia, se creo para que las mujeres dejaran de estar fregando y ellas se dieron por bien servidas con ese día inventado. Los anuncios sobe la igualdad, yo los veo como palmaditas a pendejo. La violencia, la discriminación se terminará cuando las mujeres hagan algo más allá de crear un día y hacer marchas. Se debe hacer un buen trabajo y se debe ser reconocido por tal cosa, no por ser mujer. "Necesitamos a un miembro más pero que sea mujer", qué chinguen a su madre, a mí elígeme por mi trabajo y no por mi sexo. Si muchas mujeres aspiraran a más allá de ser una ama de casa y tener hijos, las cosas serían diferentes. En mi rama de estudios hay más hombres porque las mujeres no se sienten interesadas, así de fácil. Cuando deseen progresar y tener metas, serán aplaudidas por lo que han hecho, no por tener vagina.

viernes, 5 de marzo de 2010

Día internacional de la mujer, otro invento pendejo. / Lo muy Yo.

Como diría Cartman: "Las feministas son putas gordas con la menstruación". Yo no las entiendo y estoy de acuerdo con ellas. Yo, siendo mujer, jamás me he sentido menos que un hombre. No me molesta que mi novio me abra la puerta y no me molesta tampoco yo abrírsela a él. Yo espero que mi trabajo sea reconocido por ser bueno, por aportar algo, no porque soy mujer, eso es ofensivo para mí. En la uni han puestos unos carteles, por todos lados, que dicen una pendejada así: "La mujeres también aportamos a la UNAM", no mamen. Ese tipo de mensajes sólo empeoran todo. Deberían hacer uno que dijera que los hombre aportan a la UNAM, pero no, simplemente nos hacen menos y es como si nos hicieran el favor. Dan ganas de quitar esas mamadas.
Ahora con esa tontería del día internacional de la mujer me pregunto: ¿por qué no hay un día internacional del hombre (varón)?, ¿por qué no hay igualdad en ese sentido?
Otra cosa que me parece muy pendeja es hacer esa diferencia de "niñas y niños", o sea, ¡qué mamada es esa!, "niños" es un término que engloba a todos, no es que sea "machista". Igualdad de género, eso no aplica, género, ni que fuera un sustantivo.
La violencia hacia la mujer viene desde la familia. Si una mujer permite que eso pase, pasará y los hijos creceran viendo eso y muchas veces se convierte en un ciclo que se repite. Es realmente increíble que haya madres que le digan a sus hijas casadas: "Tienes que aguantar, te casaste con él y será tu cruz". A a chingada. pendeja si se deja. Mientras no hagan algo contra eso, no parará, pero es cosa de que las mujeres hablen. El machismo es algo que se aprende y las mujeres lo promueven, cuando la mamá le dice a la hija: "Anda, sírvele a tu hermano", "es que es hombre y no puede hacer cosas de viejas", "él te mantiene y si lo dejas, qué harás". El muchacho aprende eso y como su madre lo hace, cree que así deben ser las cosas. Es algo que las mujeres deberían tener en cuenta, y no es cuestión de ignorancia, hay mujeres con carreras que igual, soy humilladas y sufren violencia. Tan poca cosa se sienten que no hacn nada por tener a un hombre a lado.

 Las pinches feministas arman su desmadre por la "igualdad" pero piden también consideraciones. Ese grupo de machorras parece que viven traumadas por no ser hombres. Creo que mientras uno se sienta inferior, lo será. Cuando cambien de actitud, muchas mujeres se darán cuenta que no es cosa de hacer marchas e inventarse días para que las tomen en cuenta. Todo es con trabajo, con hacer las cosas bien y no esperar que la gente nos aplauda sólo por ser mujeres, uno debe ser reconocido por el trabajo.